Instalaciones provisionales

Con la obra “Instalaciones provisionales” el fotógrafo realizó su trabajo de diploma para la Universidad laboral en Bielefeld en verano del 2012 y fue distinguido con el premio de promoción BFF como el mejor trabajo de diploma de una escuela universitaria.

Las fotos muestran interiores de chozas de los barrios de chabolas en la capital de Bangladesch Dhaka. Aquí viven unos cuatro millones de personas, que son casi el 30% de los habitantes, ciudadanos de urbanizaciones informales. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) calcula que desde el 2007 más de la mitad de la población mundial vive en ciudades. Con este crecimiento rápido mundialmente de las zonas de aglomeración al mismo tiempo que crece el número de personas, que viven en la miseria de los barrios de chabolas. Para el espectador con un atractivo estético, la estrechez es también una señal de la pobreza en la que muchas personas viven. Chozas de los barrios de chabolas son un problema global, un problema creciente. Sebastian Keitel, quien no pretende tanto denunciar una situación  sino mas bien hacer visible un fenómeno, pretende mostrar con su trabajo de manera ejemplar las circunstancias que rodean a las viviendas de más de un millar de personas en todo el mundo.

Sebastian Keitel

Nació en 1983 en Herford. Vive en Colonia y trabaja gracias a una beca de la VG Bildkunst en un proyecto sobre migrantes ilegales en el norte de Francia. Los comprometidos proyectos, que están muy cercanos al ser humano y retoman temas sociopolíticos, le han llevado a muchas partes del mundo y han sido distinguidos varias veces, por último con el premio Felix Schoeller Photo Award.

“Para mí es importante, que mis fotos estén visualmente cargadas y subyuguen a los espectadores y en consecuencia formule preguntas, que sean profundas”, dice Sebastian Keitel.

Sus obras se mueven a lo largo de una fina línea entre documentación y ficción. Esos dos niveles, fascinación por la magia del mundo objetivo y empatía para el individuo, hacen que las obras de Sebastian Keitel tengan esa calidad excepcional.